Doce Apóstoles cruzan el Ebro

Ilusión, sentimiento, pasión… e incluso morbo (por aquellos que decían que no se llegaría), más rápido o más lento según los gustos, estos doce apóstoles que simbolizan la Santa Cena, llegaron a lo que es su casa, la Iglesia del Perpetuo Socorro.

Cuando iba caminando por la calle Don Jaime iba viendo a gente coger sitio como si de un Jueves Santo se tratase, por el puente de piedra mucha movilización hacia la margen izquierda y cuando estás en ella, entre los árboles no veías el paso, veías un grupo de gente arropando a esos costaleros y a su capataz lleno de esa energía positiva que te puede dar tu propia hija, cuando va de tu mano, ya no en el día Grande (cuando ese paso salga de su sede canónica) sino, un reto  que jamás lo habían realizado.

Javier Barco, capataz de éste paso.  Tenía un brillo en los ojos, único ¡¡ La cena anda !!  Se le veía que en cuanto tenía a alguien cerca, hablaba unos segundos, un abrazo, un beso… Unos de sus comentarios que realizó fue:  ha sido muy emocionante llegar al puente de piedra y ver todo el Pilar iluminao.  Estaba relajado su sonrisa le delataba era un sueño hecho realidad.

Ese paso, que, cuando se estrenó en Zaragoza tenía ruedas, pero la Cofradía sabía que en algún  momento su paso titular estaría impulsado por un puñado de corazones llenos de sentimiento y pasión. Así es.

Costaleros… porque nombrar a uno cuando todos ellos hacen una piña debajo de estar trabajaderas.  Como bien les dijo su capataz antes de entrar en la iglesia,  no habéis estao callaos… (Silencio de él)  así fue. Ellos también tenían esa ilusión, veían que estaban arropados por una muchedumbre de gente, familiares, amigos, cofrades, público que no sabía que pasaba…

Debajo del paso entre unos de esos “gritos” de ánimos que se dan entre ellos en tramos con un poco más de dificultad, se pudo oír, con esa fuerza que tienen: y dicen que con ruedas es lo mismo… Éste paso lo mueve el sentimiento.

Y así fue.  Sentimiento. 

Desde Capirotes y Terceroles Enhorabuena a Javier Barco, enhorabuena a esos costaleros que hicieron que este proyecto fuese un sueño cumplido y enhorabuena a la Cofradía de la Institución de la Sagrada Eucaristía.

Texto: Sofía del Arco